01-ago-2009
El bibliotecario escolar
Por Yolanda Torres,
castaner2002@yahoo.com
Maestría en Ciencias Bibliotecarias y de Información,
Lares, Puerto Rico.-
El bibliotecario escolar no importa el nivel de enseñanza de la escuela es un mago. Sí, así como lo está leyendo, un mago. ¿Por qué? Si usted como muchas personas nunca ha sido ni es bibliotecario escolar esto le puede parecer chistoso o gracioso, absurdo, una locura, los adjetivos podrían llenar cientos de páginas.
Para los que estén leyendo esto y sí son bibliotecarios escolares estarán de acuerdo con estos planteamientos. En primer lugar les voy a explicar con el siguiente ejemplo real y verídico. Lean el siguiente diálogo: “Necesito un libro que hable de una cosa que me dijeron que escribiera”. Miro al estudiante, mientras estoy pensando “los libros no hablan, eso es una cualidad de los humanos”. A la vez le pregunto al joven, “¿sobre qué tema estas buscando información?” El estudiante me mira como si estuviera hablando en chino, “no sé”, contesta. Vuelvo a preguntar; ¿para cuál clase necesitas preparar el trabajo? El joven mira sus manos y responde “para la de Historia”. ¿Qué tema están cubriendo en clase en estos momentos?” pregunto. Vuelve el joven a mirar hacia el techo, lo tenía fascinado. Sobre el descubrimiento”. Bien, ya era algo, aleluya. “¿Sobre el descubrimiento de América o de Puerto Rico?” “De Puerto Rico”, contestó el estudiante. “Vamos a la Colección de Puerto Rico a buscar en los libros de Historia de Puerto Rico que tenemos disponible.”; contesto contenta al fin de poder ayudar a nuestro amigo que se fue muy sastifecho con la información que necesitaba.
Aparte de magos, también somos consejeros, confidentes y suplidores de materiales escolares como lápices, papel, cartapacios, en fin de todo. Otra función que desempeñamos es la de niñeros. Faltó un maestro y el director sin encomendarse a nadie envía los estudiantes a la biblioteca para que no molesten. Independientemente de que el bibliotecario tenga un grupo para destrezas a esa hora o tenga que realizar trabajo administrativo como catalogar, hacer inventario, preparar material, coordinar con los maestros y personal de apoyo (consejeros, trabajadores sociales).
No hay nada más gratificante que ver las caritas de los niños cuando vienes a la biblioteca a que les lean un cuento. O ver los más grandes que vienen a hacer sus trabajos escolares o simplemente a leer o a navegar en el internet.
Termino con estas palabras, sí somos magos y nuestra magia es mucho mejor que la de Harry Potter o el Señor de los Anillos.
1 comentario:
Estoy muy de acuerdo contigo, eso me ha pasado algunas veces y es que a veces parece que ni ellos saben lo que andan buscando pero aún así, y despues de todo el interrogatorio podemos servir de ayuda en algo y eso es muy gratificante. Saludos. muy bonito tu blog.
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